Casa Mari es mucho más que un lugar donde disfrutar de una buena sidra. Ubicada en el corazón de Asturias, esta auténtica sidrería tiene una larga historia que se remonta a generaciones atrás. Con su ambiente acogedor y su exquisita gastronomía, Casa Mari ofrece a sus visitantes una experiencia única que combina tradición y modernidad. En este artículo te contaremos todo lo que necesitas saber sobre este icónico establecimiento asturiano.
Descubre la historia detrás de Casa Mari
Su historia comienza en un pequeño caserío familiar en las tierras asturianas, donde la familia Mari elaboraba su propia sidra de forma artesanal. Con el paso del tiempo, la fama de su sidra fue creciendo y decidieron abrir las puertas de Casa Mari para compartir su pasión con el mundo. Desde entonces, se ha convertido en un referente obligado para los amantes de la buena sidra y la gastronomía tradicional asturiana.
La excelencia en cada sorbo
En Casa Mari, la excelencia es una máxima que se refleja en cada sorbo de sidra que se sirve en sus mesas. El proceso de elaboración de la sidra, cuidadosamente supervisado por los maestros sidreros de la casa, garantiza un producto de calidad incomparable. Cada botella de sidra es el resultado de años de experiencia y un profundo respeto por la tradición sidrera asturiana. En Casa Mari, cada visita es una oportunidad para deleitar tus sentidos con lo mejor de la cultura culinaria asturiana.
Cocina tradicional con un toque contemporáneo
Además de su exquisita sidra, Casa Mari destaca por su oferta gastronómica que combina la tradición culinaria asturiana con un toque contemporáneo. Desde los clásicos platos de la región, como la fabada asturiana o el cachopo, hasta creaciones originales que sorprenden a los comensales más exigentes, en Casa Mari encontrarás una propuesta gastronómica variada y exquisita. Cada bocado es un viaje a los sabores de Asturias, elaborado con ingredientes frescos y de la más alta calidad.